A conquistar Charleroi

El Real Madrid de baloncesto consiguió el pasado martes su clasificación para la final de la Copa Uleb. Y lo hizo volviendo al juego de la primera fase de la temporada. La derrota en la final de la Copa del Rey ante el Barça había dejado huellas en una plantilla que consiguió sobreponerse a las lesiones y a los duros rivales, pero que no había sabido digerir mentalmente la pérdida de un título muy ansiado. Eso se ha notado mucho. En los últimos tres partidos el Madrid cayó en ACB contra un equipo en descenso como el Valladolid, perdió contra el Gran Canaria en su inexpugnable feudo de Vistalegre y fue incapaz de tomarse la venganza ante el Barcelona en el Palau. Entre medias los de Joan Plaza caían en Rusia ante el Unics Kazan por siete, tras un final que logró maquillar una desventaja que llegó a alcanzar la veintena de puntos.

Así que el partido de vuelta suponía una de esas citas que pueden marcar la temporada de un equipo. Y lo era porque los blancos debían demostrar si eran capaces de frenar una racha negativa en un momento tan decisivo como el de una semifinal. El rival, sin ser el mejor equipo de Europa, era un adversario de entidad. El Unics Kazan le está peleando la liga rusa al todopoderoso CSKA y había demostrado en la Uleb su buen hacer. Pero el Madrid debía preocuparse por volver a ser él mismo. Y vaya si lo hizo. Mató el encuentro en el tercer cuarto con una gran defensa y un ataque que se mantuvo constante durante todo el partido. Justo como había hecho desde principio de temporada. En Rusia se salió Smith. En Vistalegre lo hizo Bullock, que tras sus malas actuaciones en la ida y en Barcelona volvió a demostrar que no suele fallar en las grandes citas. Pero el que estuvo excelso en toda la eliminatoria fue Felipe Reyes, que cuajó unas de las mejores actuaciones personales que se le recuerdan.

Ahora en la final de Charleroi espera el Lietuvos Rytas, un equipo muy inferior al Madrid. Pero también lo era el Hapoel de Will Solomon y Kelly McCarty que le birló la Uleb de 2004 al conjunto blanco. Así que no hay que confiarse, porque aunque pueda sonar a trofeo de segunda, la Copa Uleb tiene el premio de jugar la próxima Euroliga, verdadero objetivo del Madrid esta temporada. Con el billete a la máxima competición europea en la mano, los de Joan Plaza podrían afrontar lo que queda de ACB con mucha menos presión. Eso convertiría al Madrid en un equipo mucho más peligroso de lo que ya es.

1 comentarios:

Lorena dijo...

Jooooooooooooooo, yo pensé que ibas a hablar de Nacho cho o de Cho cho na... (jejejejeje)

Venga Va... Un homenaje a Azofra... Tanto Real Madrid...