Memento madridista


Sólo resta la confirmación oficial, pero Florentino se va a presentar a las elecciones del Real Madrid. Una vez que los problemas de salud de su mujer parecen mejorar, Pérez ya trabaja en perfilar su candidatura. Hace pocos días nombró a Juanjo Díaz (ex redactor de Marca) como director de comunicación de ACS. El movimiento es idéntico al que realizó con Joaquín Maroto cuando fichó al hoy periodista del diario As con el fin de que dirigiera la comunicación de su constructora para, una vez ganados los comicios de 2000, pasar a ser jefe de prensa del club blanco.
Según se percibe en el ambiente, Florentino arrasaría. As publica hoy una encuesta entre la afición merengue que le otorgaría un respaldo cercano al 80%. Pese a que la muestra no se toma sobre los socios –los que verdaderamente tienen que tomar la decisión-, a nadie se le escapa quién es el el gran favorito, aun sin saber la nómina de candidatos. No hay duda de que el recuerdo de los buenos primeros años tapan el desastroso declive del proyecto de Florentino. A esa mayoría del madridismo le ocurre como al protagonista de la película Memento, el cual era incapaz de recordar los aconteciemientos recientes. Esta amnesia anterógrada comenzó el 27 de febrero de 2006, cuando Florentinó dimitió de su cargo dejando al club a mitad de temporada, añadiendo a la crisis deportiva, de la cual era responsable directo, una crisis institucional cuyas consecuencias se prolongan hasta el día de hoy. Por eso muchos no tienen presentes los tres últimos años sin títulos (una de las peores sequías de la historia del Real Madrid), el despido de Del Bosque tras ganar la Liga para traer a un Queiroz que resultó un fracaso, la dimisión de Camacho por entender que el Presidente mimaba en exceso a sus ‘galácticos’, el fichaje de Eto'o por el Barça facilitado por un Florentino que no quiso que el camerunés regresara al Bernabéu vestido de blanco, la adquisición de Beckham, que frustró la de Ronaldinho, etc. Además, Florentino no hizo nada por cambiar la vergüenza del voto por correo en todos sus años de mandato. Él perdió los comicios de 1995 ante Mendoza por ese sistema y una vez que lo conoció lo utilizó para vencer en 2000 y en 2004 (aunque en estas últimas no le hubiera hecho falta). Por eso Florentino y todo aquel que haya participado en cualquiera de las directivas que ha tenido el Madrid en los últimos años no deberían volver a dirigir el club. Pero parece que lo hará.

0 comentarios: