Gran Vía: La calzada de Chiquito

Desde hace unos días Madrid honra involuntariamente a Chiquito de la Calzada en pleno centenario de la Gran Vía. En uno de los puntos más transitados de la famosa arteria de la capital de España, entre las calles Fuencarral y Montera, se indica un paso de cebra con el icono de un peatón que recuerda inmediatamente a una de las posturas básicas de Chiquito.


Parece mentira que nadie hubiera reparado antes en las enormes posibilidades para la señalización vial que ofrece Chiquito. Y es que ese muñeco pintado en la carretera parece decir ¡Quietooorrrr cobarde! Si quieres cruzar de calzada haz como Chiquito y ten cudadín!

Periodistas entre el paro y el pluriempleo


“La culpa del paro en España es de Zapatero”, dice el mismo periodista desde una tertulia matinal de radio, por la tarde en un encuentro digital en una página web, por la noche en un programa de debate televisivo y al día siguiente, en la columna de opinión de un periódico. Y es que una sola persona es capaz de acaparar hasta cinco trabajos o colaboraciones en medios de comunicación, mientras 6.500 periodistas engrosan la lista de desempleados. Quizá la culpa del paro en España sea de Zapatero, pero no hay duda de que en el sector de los medios de comunicación cuenta con abundantes secuaces.
Donde resulta más evidente el pluriempleo periodístico es en las tertulias políticas. Cada aparición suele retribuirse por una cantidad que oscila entre los 500 y los 1.000 euros. Es decir, que con una o dos apariciones al mes cualquier tertuliano gana más que la mayoría de los “redactores rasos” de este país. Difícil, por no decir imposible, es encontrar a algún tertuliano que se limite a un solo espacio. Ejemplos hay muchos: Carmen Tomás tiene un programa en Libertad Digital TV al mismo tiempo que es tertuliana de Intereconomía y habitual en los debates de Telemadrid; Miguel Ángel Rodríguez aparece en La Noria de Telecinco, en Curri y compañía de La10, en Espejo Público de Antena 3, en Herrera en la Onda de Onda Cero, y en alguna otra ventana más; Carlos Carnicero es tertuliano de cabecera de distintos programas de la Ser, escribe asiduamente en El País, y aparece en 59 segundos, de Televisión Española; Siro López alternó la jefatura de Deportes de Telemadrid con colaboraciones en Punto Pelota de Intereconomía y, más recientemente, combinó su labor de narrador de baloncesto en la Ser con su asiento fijo en los debates de Josep Pedrerol. Pero el ansia por acaparar no se limita a los tertulianos ni a las colaboraciones. Hay periodistas que copan varios espacios en distintos medios: Manolo Lama presenta diariamente un programa de deportes en Cuatro en la sobremesa y otro en la Ser por la tarde, mientras que los fines de semana se encarga de narrar partidos para la emisora líder de la radio española. Aunque la institucionalización del pluriempleo la ha consagrado Veo7 con el programa La vuelta al mundo, que es presentado cada día de la semana por un periodista responsable de otra ocupación: Pedro J. Ramírez (director de El Mundo), Ernesto Saez de Buruaga ) director de (Así son las mañanas de la Cope), Luis Herrero (director de En casa de Herrero de Esradio) o Carlos Cuesta (redactor jefe de Expansión).
Vanidad y avaricia caracterizan a estos profesionales que no alternan distintos trabajos para poder llegar a final de mes, sino para acaparar más fama y dinero. A cambio 6.500 periodistas en paro quedan abocados al anonimato y la miseria.

Todo el mundo es periodista... menos el de Europa Press

Para las webs de Periodista DigitalNoticias de Navarra, Las Provincias, El Economista, El Norte de Castilla y un buen número más de diarios digitales, resulta que tan periodista es Almudena Ariza, como Florentino Fernández. Incluso los responsables de que se haya publicado esta noticia se podrían considerar como periodistas, ¿por qué no? Poco importa que hayan volcado el contenido sin reparar en el detalle de que en ella se considera a Florentino Fernández o a Pepe Domingo Castaño como periodistas (profesión que ni ellos mismo se atribuyen). Con salir por la tele o hablar por la radio vale para que a alguien se le pueda llamar "periodista".



Lamentablemente, el redactor de Europa Press que ha confeccionado la noticia que estas webs han reproducido sin revisión alguna, no puede ser considerado como periodista. La imposibilidad no viene  dada por el error de apreciación o por la falta de pericia a la hora de buscar un término que agrupe a la abigarrada lista de agraciados con la Antena de Oro de este año. Lo que impide que llamemos "periodista" a esta anónima persona es que ella no sale en la tele.

Los argumentos de Contador suenan a chino Fuyu Li

Un ciclista da positivo por Clembuterol. El valor encontrado en la muestra es ínfimo (aproximadamente entre 10 y 20 veces inferior a la cantidad mínima que la Agencia Mundial contra el Dopaje exige que pueda detectar un laboratorio).  Las máquinas han de ser capaces de encontrar 1.00 ng/mL, aunque se considera que el umbral que indica un consumo de clembuterol con ánimo dopante debe estar en torno a los 2.00 ng/mL. Lo hallado en la muestra del deportista es de 0.05 ng/mL. El ciclista declara: "No tengo ni idea de cómo llegó el Clembuterol a mi cuerpo. Todo lo que sé es que nunca he utilizado productos dopantes en mi a lo largo de mi carrera". Para corroborar su inocencia el acusado recurre a la opinión de un médico experto que sentencia: "Un valor tan extremadamente bajo apunta hacia un caso de contaminación alimentaria. El Clenbuterol está presente en suplementos alimenticios y en algunas carnes".

La historia parece conocida... pero no la protagoniza Alberto Contador, sino Fuyu Li. A este ciclista chino le ocurrió algo parecido a lo que le está sucediendo al tricampeón del Tour de Francia. El corredor asiático del RadioShack lleva suspendido cautelarmente desde marzo de 2010 por un caso casi idéntico al de Contador. Ambos esgrimen el mismo argumento de la contaminación alimentaria como defensa.

La mayor potencia mundial en deportes

Los recientes éxitos del deporte español han hecho pensar a más de uno que España es la mayor potencia mundial al respecto. Pero, ¿es esto verdad o más bien se trata de una exageración chauvinista? Lo cierto es que resulta complicado responder de manera objetiva a esta pregunta. Lo primero que habría que identificar es qué entendemos por deporte mundial y cuántas disciplinas lo conforman. En todo el planeta se desarrollan una enorme cantidad de actividades deportivas, que van desde las más populares y extendidas (fútbol, baloncesto, atletismo, etc.) hasta las menos conocidas. Dentro de este grupo de deportes minoritarios encontramos juegos tradicionales (como el kabaddi), variaciones sobre deportes asentados (como el bandy con respecto al hockey hielo) y actividades modernas creadas “en laboratorio” (como el korfbal). A ellas se suman una serie de disciplinas sobre las que no hay consenso en considerarlas deporte (ajedrez, baile deportivo, orientación, etc.).
Para establecer una criba que permita elaborar un censo de deportes manejable a la hora de dilucidar cuál es la mayor potencia deportiva a nivel mundial resulta imprescindible introducir una serie de criterios restrictivos en cada actividad, tales como profesionalidad, alcance geográfico, existencia de federaciones y competiciones internacionales, número de practicantes y seguidores, etc. El resultado final será siempre subjetivo, ya que dependerá de a qué criterios se les da mayor importancia. Quizá el mecanismo que mayor validez oficiosa tenga a la hora de dilucidar cuál es el mejor país en deporte sea el medallero de los Juegos Olímpicos. Sin embargo, más allá de la arbitrariedad que supone la elección de las disciplinas participantes, en los Juegos se establece el ránking por el número de medallas y no por disciplinas. De esta manera hay deportes infravalorados con respecto a otros, ya que mientras que en actividades de equipo sólo se reparte un oro, en otras como el atletismo o la natación se ponen en juego decenas.
Por ello a continuación se propone una selección, subjetiva también, en la que se analizan veinte deportes escogidos por su nivel de relevancia; veinte por tratarse de una cifra redonda, manejable,y en la que pueden estar representados los deportes más populares a nivel mundial atendiendo a criterios anteriormente referidos como popularidad, extensión, etc. En cada uno de ellos se tiene en cuenta qué país es el vencedor de la última edición de la competición más prestigiosa de la especialidad, (ya sea la Copa del Mundo, los Juegos Olímpicos o, como en el caso del ciclismo con el Tour, otra competición) para al final, poder establecer una lista que permita conocer cuál es la mayor potencia mundial en deportes atendiendo a esta clasificación.
  • Fútbol: España (Mundial 2010).
  • Cricket: Australia (Mundial 2007).
  • Hockey Hierba: Australia (Mundial 2010).
  • Tenis: España (Rafa Nadal es ganador de 3 de los cuatro torneos del Grand Slam en 2010).
  • Voleibol: Estados Unidos (JJ.OO. 2008).
  • Tenis de mesa: China (Vencedor en individuales y dobles en la Copa del Mundo de 2010).
  • Beisbol: Estados Unidos (Mundial 2009).
  • Golf: Estados Unidos (Los cuatro Majors de 2010 se han repartido entre Estados Unidos, Gran Bretaña, Sudáfrica y Alemania. Para desempatar hay que echar mano de los resultados de 2009, con 2 triunfos norteamericanos, uno argentino y otro coreano).
  • Baloncesto: Estados Unidos (JJ.OO. 2008).
  • Fútbol Americano: Estados Unidos (Mundial 2007).
  • Atletismo: Estados Unidos (Mundial 2009 [10 oros]).
  • Balonmano: Francia (Mundial 2009).
  • Ciclismo: España (Alberto Contador es el vencedor del Tour de Francia 2010).
  • Natación: Estados Unidos (Mundial 2009 [10 oros]).
  • Rugby: Sudáfrica (Mundial 2007).
  • Deportes de invierno: Canadá (JJ.OO. 2009 [14 oros]).
  • Automovilismo: Gran Bretaña (Jenson Button es el campón del Mundial de Fórmula 1 2009).
  • Boxeo: Gran Bretaña (David Haye es el campeón de la WBA).
  • Gimnasia artística femenina: China (Mundial 2009 [6 oros]).
  • Judo: Japón (Mundial 2009 [3 oros]).
Así, el ranking de países quedaría de la siguiente forma:
  1. Estados Unidos (7).
  2. España (3).
  3. Australia, China y Gran Bretaña (2).
  4. Canadá, Francia, Japón y Sudáfrica (1).
Esta lista permite extraer dos conclusiones evidentes: que Estados Unidos es la mayor potencia mundial en deporte y que España se encuentra entre la élite mundial, pero por debajo de los norteamericanos.